Lourdes Madero Psicología
Sobre mí
Nacemos para amar y ser amados
Si tuviera que elegir tres adjetivos para definirme creo que serían: cercana, paciente y curiosa.
Elegí ser terapeuta porque me fascina el ser humano. Confío en él y en el cambio que puede hacer. Tengo la opinión de que muchas veces solo necesitamos una mirada de confianza para creer que somos personas únicas capaces de aportar algo único al mundo.
Un aspecto transversal de mi trabajo tiene que ver con la mirada. No nacemos solos, la mirada externa que hemos recibido, desde nuestro nacimiento, modula en gran parte quienes somos.
Reconocernos pasa por transitar nuestra historia y los acontecimientos que ha habido en ella. Cómo miramos nuestro alrededor, nos hace conscientes de cómo nos posicionamos ante lo que la vida nos ofrece.
Desde el espacio que ofrezco, te acompaño a reconocer tu historia y a profundizar en ella


Enfoque terapéutico
Considero integrador mi enfoque teraupético. Estudié el Máster General Sanitario en la Universidad Pontificia de Comillas, donde exploré diferentes estilos terapéuticos: cognitivo-conductual, humanista, psicodinámico y sistémico. Formarme desde diferentes estilos terapéuticos me ha permitido confirmar que los mismos recursos no le valen a todo el mundo; que cada una de las personas que se sienta en frente tiene una historia muy concreta a la que adaptarse. Por eso, una parte clave de mi trabajo es la evaluación. Considero esencial reconocer qué necesidades tiene la persona que tengo delante.
Una vez realizada la evaluación, programamos una guía de viaje para transitar y alcanzar objetivos.